Solo para colocar en perspectiva este artículo, hace más de 35 años, cuando me graduaba de la universidad como Ingeniero Electrónico, empezaban a aparecer los PC, y en «sistemas» trabajábamos los que nos gustaba el tema. Compartí con ingenieros de muchas ramas: Industriales, Mecánicos, y hasta Sanitarios, expertos en el uso de los computadores para obtener resultados, experiencia obtenida en el uso de los mismos y no en la academia.
Adentrados en el Siglo XXI sería una utopía pensar en hacer lo que hicimos hace 35 años. Hoy los requerimientos en conocimientos son mucho más exigentes que los que se requerían entonces, requerimientos exigidos por dos factores preponderantes: la aparición de una cantidad enorme de tecnologías y el uso de las mismas para la obtención de ventajas competitivas.
A pesar de haberse complicado en ordenes de magnitud el manejo de la tecnología, también han aparecido herramientas pretendiendo simplificar su desarrollo y aplicación. Windows reemplazó el sistema operativo en caracteres, la Internet generó la posibilidad de colocar la información a disposición de todo quien se pueda conectar.
Sin embargo, los proyectos de sistemas siguen siendo proyectos de sistemas y llevados por la falsa expectativa que con pocos conocimientos y unos cuantos clic podemos desarrollar una aplicación, se ha caído en el desarrollo incompleto de aplicaciones, faltas de funcionalidad y calidad.
Los funcionarios de TI requieren hoy tener conocimientos en múltiples áreas. Inicialmente, deberán tener la habilidad para desbaratar un computador, y volverlo a armar. Se requieren también habilidades de administración de sistemas operativos como el Windows y Linux, y familiaridad con varias de las bases de datos significativas como Oracle, DB2, SQL Server y con las bases de datos de licencia abierta como MySQL y PosgresSQL.
La conectividad y la presencia global exigen experiencia en el manejo seguro de la informática y el conocimiento y aplicación de políticas de seguridad, además de la ubicuidad que se genera hoy con la explosión de dispositivos móviles para tener en la punta del dedo acceso a toda la compañía.
No perdamos de vista que buena parte de estas tecnologías ahora las conseguimos «servidas» por un proveedor, por lo cual nuestros conocimientos técnicos hay que complementarlos con conocimientos de manejo de contratos de servicio, términos y vigencias, y otra suerte de tópicos que por lo general no se abordan en las escuelas de ingeniería, y mucho menos en planes de formación empresarial.
La necesidad de conocer tecnologías de Internet no se quedan atrás. Se requieren amplios conocimientos en la creación de código HTML y su edición. Se incorporan también todas las tecnologías que rodean la generación de aplicaciones Web como el PHP, ASP, CSS, JavaScript, Perl, XML y muchas otras que tienen cada una su utilización particular. También es indispensable poder manejar un lenguaje de guiones de servidor (scripting) y conocer por lo menos la forma de operar de un lenguaje moderno de programación.
El dominio de los temas de la programación orientada a objetos se da por sentado. De nuevo, la programación para dispositivos móviles, la incorporación de la Internet de las Cosas, Inteligencia Artificial, robótica y analítica, entre muchas otras tecnologías emergentes, requerirá conocimientos puntuales para estas actividades. Y ese horizonte de tecnologías emergentes sigue ampliándose.
No se pueden dejar por fuera los requisitos para configurar redes de comunicaciones locales y externas, y elementos para hacer seguimiento a fallos en el sistema y la habilidad para automatizar actividades de mantenimientos de equipos, o remplazo de los mismos, y ahora la interacción entre soluciones móviles y soluciones de estaciones fijas.
Por último, pero no menos importante se requiere familiarización con las bases de datos de conocimientos de TI en la Web, habilidades de trabajo en equipo y manejo de personal y una piel dura. A estas les llamamos habilidades humanas, otro juego de herramientas que tampoco se obtiene fácilmente en los currículos universitarios.
A todo esto se le deben adicionar el estar siempre atento a las nuevas tecnologías, las tendencias y modelos administrativos de las mismas, y su aplicabilidad en las empresas. Aprender a manejar proyectos que se cumplan, a hacer más con menos dinero y menos gente, y a sostener o generar las ventajas competitivas de la compañía.
Revisando los planes de estudio de las universidades, se encuentra una brecha entre los conocimientos que se están impartiendo y los que se requieren en el campo laboral. Por el momento no es suficiente un título universitario, deberán los estudiantes continuar en esquemas de actualización permanente para no quedar obsoletos en el corto tiempo.
No perdamos de vista que existe un buen número de empresas que se ha conformado en el ámbito de los servicios para brindar precisamente servicios de los mas bajos en la cadena entre la infraestructura y el usuario, como el mantenimiento de equipos y servicio a las redes. También hay empresas especializadas en tecnologías puntuales como el desarrollo de Apps, o con experiencia en el Internet de las cosas.
Se requerirá en los Gerentes de TI poder generar una mezcla de conocimiento al interior de la compañía, complementado con especificidades fuera de la misma. La construcción de un Plan Estratégico de TI deberá también encontrar las brechas de conocimientos requeridos y determinar estrategias para cubrir estas brechas.