Para que la propuesta de valor genere ventas, primero hay que presentarla. Para esto existen herramientas de generación de tráfico, pero no se deje timar con «espejitos».
Si bien la presentación de la propuesta de valor constituye la primera etapa para un mercadeo exitoso de cualquier índole, si esta propuesta de valor no se presenta efectivamente, no se pueden cumplir con los objetivos estipulados en la estrategia.
Todos los elementos del mercadeo tradicional han sido también migrados hacia la Web, pero también contamos con herramientas nuevas que permiten buscar ese tráfico en la misma Web para atraer posibles clientes o prospectos que esperamos enganchar con la propuesta de valor.
Dentro del tema de generación de tráfico si que han surgido «expertos autoproclamados» que dicen tener la fórmula mágica para lograr trafico por manadas a su portal. Hay que tener muy claro qué tipo de estrategias son las que pueden llegar a funcionar y cuales no.
Es necesario aclarar que nos referimos a la generación de tráfico CALIFICADO. Calificado está en mayúsculas porque la generación de tráfico indiscriminado no tiene ningún sentido distinto a permitirnos hacer alarde del número de visitas al portal, pero en últimas no es número de visitas lo que queremos, sino número de visitantes interesados en nuestra propuesta de valor.
Si estamos ofreciendo un libro de jardinería, no nos interesa gente buscando libros de carpintería, ni herramientas de jardinería, ni nada distinto al libro de jardinería. Si, ya oigo: ¡pero el que busca herramientas también puede querer libros! Y efectivamente puede ser cierto, pero no es el nicho específico para el cual van dirigida nuestra propuesta de valor (a menos que la redactemos específicamente para quienes usan las herramientas).
Hay varias técnicas que hemos usado y que hemos podido comprobar que funcionan. Antes de continuar, es importante aclara que estas herramientas funcionan de manera distinta para cada estrategia y cada portal. Es indispensable que acompañe la estrategia con un sistema de estadísticas y medición que permitan realmente tomarle el pulso a la estrategia y no depender de supuestos.
Los boletines electrónicos generan aproximadamente la mitad del tráfico a nuestro portal en las diferentes secciones. Tráfico calificado, porque todos, sin excepción, son suscriptores voluntarios.
La mayor dificultad con los boletines es la generación de contenido. No es fácil mantener un flujo semanal constante de información pertinente (porque cuando deje de ser pertinente, las cancelaciones aumentan!). Es indispensable planear adecuadamente lo que enviará y como atenderá la respuesta a su propuesta de valor.
Paso siguiente es conseguir la lista de distribución. Créanme, no tiene sentido tener suscriptores que no se han inscrito voluntariamente a recibir el boletín. La lista toma su tiempo armarla, pero el potencial de la misma crece exponencialmente en la medida en que los suscriptores sean voluntarios. Aléjense de los que les venden millones de direcciones de correo de tal o cual país. Esos envíos no hacen más que dañar la reputación de su empresa, bien trabajada por años, para dañarla por un facilismo detrás de una propuesta inútil.
Los boletines le deben generar visitas a su sitio. Si no lo hacen, tal vez no está cumpliendo con la expectativa enunciada inicialmente al emitir el boletín.
Otra herramienta muy eficiente es el posicionamiento en los buscadores, léase Google primordialmente, y Bing como para no pecar o por si acaso. Hay muchos «genios» del posicionamiento, pero curiosamente cuando uno visita los portales de estos autoproclamados «gurú» y revisa su posición en los buscadores, comprueba que no son más que charlatanes.
El posicionamiento en los buscadores también es un proceso arduo, constante, de esfuerzo permanente, y de ajustes constantes. Exigen estar midiendo constantemente el resultado de los cambios, y hacer los ajustes pertinentes en forma ágil. Las fórmulas «mágicas» de ubicación importante en forma rápida no funcionan. Cada día salen más estrategias para mejorar el posicionamiento. Enlaces cruzados, participación con vídeos y en redes sociales, y otras que deben ser comprobadas. No pretendemos que no ensayen, solo midan lo que ensayen, y no «traguen entero» todo lo que le ofrezcan. En este rubro es muy fácil: ¡verifique en qué posición de los buscadores sale la empresa o persona que le está ofreciendo posicionarlo!
Complementamos la trilogía del tráfico con la publicidad por Internet. Hoy existen herramientas de fácil aplicación como la que ofrece Google Adwords, y mas recientemente las alternativas en las redes sociales como Facebook. Sin embargo, lograr efectividad en el uso de la herramienta no es tan sencillo. También en este campo hay muchos «expertos» que han hecho de este proceso un negocio. Y eso está bien, solo que es indispensable que se negocie con ellos con base en el resultado que a usted le interesa: trafico CALIFICADO, ese que le va a «comprar lo que usted vende». El resto del tráfico es dinero perdido.
La generación del tráfico es indispensable. No hacerlo es como construir una valla publicitaria con la modelo del momento, y guardarla dentro de la bodega de la empresa. Pero tampoco sirve generar una avalancha de tráfico que no está interesado en lo que necesitamos. Una adecuada estrategia de generación de tráfico hará que su estrategia de negocio funcione adecuadamente.
Ahora bien, generar el tráfico y no convertir, es decir, no cumplir con el propósito para el cual se genera el tráfico, no deja de ser un ejercicio académico. Al final del día, lo que se quiere es que quienes lleguen al sitio y vean la propuesta de valor, conviertan a cliente, suscriptor o lo que queramos hacer en la página. Esto es lo que se constituye como la Conversión, y es el tercer paso en la estrategia digital.